15.2.11

Ya lo sabes

En ocasiones deseo escribir la historia del siglo, conmover al hombre más insensible, hacer llorar o reír a la mujer más seria. A veces me gustaría ser buena en algo que me gusta. Escribir. Todo lo dirá el tiempo, pero yo y el tiempo tenemos una relación un tanto tensa. En ocasiones me gustaría escuchar y ser escuchada de igual modo, ¿y por qué no? Alzar mi voz, cantar, y no sentirme ridícula. Todos tenemos sueños de los que avergonzarnos que, lamentablemente, son los que más ansiamos y los que nunca llegamos a cumplir por el simple hecho de que son "ridículos". He de decir, que nada es ridículo si realmente te hace bien. No abandones tu sueño, porque si luchas puedes perder, si no lo haces, estás perdido. Que más da el qué dirán, repito que todos tenemos metas y sueños inimaginables para el resto. Así que deshazte de toda esa vergüenza y ¡cúmplelo!, haz realidad tu sueño; yo estoy dispuesta a apoyarte en todo.

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Cuando los árboles no dejan ver el bosque