Esperaré.

La FELICIDAD, si es que existe, es como una pequeña mariposa. Si corres tras ella, jamás la atraparás. Sin embargo si esperas, te quedas quieta y tranquila; sin miedo y sin intentar conseguirla, puede, SOLO puede que se pose sobre ti.
Sinceramente yo prefiero arriesgarme y esperar, pero no sentada ni mirando como corren los demás. La esperaré como se merece, disfrutando CADA MOMENTO junto a las personas que me rodean. Las personas que me quieren, las que me comprenden e incluso las que no puedo ni ver. Y tal vez así me daré cuenta de que en la espera está la auténtica felicidad.

¿Quién dijo que todo tenía que ser bonito, tranquilo, alegre o simplemente perfecto?. La gente tiene metido en la cabeza que para ser feliz tienen que conseguir esa perfección: que no existe. En lo imperfecto se encuentra el amor, la felicidad y todo aquello que busquemos.